Presentamos unos cuantos bloques del Muro de Competición con estos dos grandes escaladores.
Adiós a Patrick Edlinger
A finales de los años 80 del siglo XX aparecían las primeras competiciones de escalada, como Bardonecchia 1985, Arco y Snowbird (Utah) en 1986. Un joven escalador rubio, delgado y con el pelo largo y rizado, conocido por las películas de Jean Paul Janssen (La vida sobre la punta de los dedos y Opera Vertical, sobre todo) gana con facilidad estas primeras pruebas, en un deporte que aún está definiendo sus reglas. En 1982, sus imágenes recorriendo sin cuerda y con un estilo lento y seguro las paredes de Buoux en la primera película habían sacado la escalada del pequeño mundo de los especialistas para convertirle en uno de los personajes más populares de Francia.
Patrick Edlinger y la invención de la escalada libre
Edlinger nació en 1960, el mismo año en que lo hizo el otro gran mito de la escalada, Wolfgang Gullich. Desde Dax, su ciudad natal comienza a escalar a los 8 años, para comenzar a salir a la roca con asiduidad cuando se encuentra estudiando en Toulon, a mediados de los años 70. Junto a otro de los grandes nombres de la escalada, su amigo Patrick Berhault († 2004), se hacen asíduos de las paredes del sur de Francia. En plena locura tras el 68 francés, su forma de vida es libre y minimalista: son una mezcla de atletas de élite y bohemios, que comienzan a escalar sin pies de gato, cuerdas o arneses. Cuando Edlinger aparece con sus características mallas de colores y sus durísimos entrenamientos atléticos, musculación, relajación, dieta ya está definiendo las reglas de una forma de vida que conecta la naturaleza y el movimiento en la roca, pasando por ella con pocos seguros fijos en la pared, solo útiles para evitar caer hasta el suelo. El más tímido de los dos Patrick que han creado un arte de vivir se convierte en el personaje más conocido en su país, según Paris-Match. Este hombre, que se mueve por las paredes del sur de Francia principalmente, en auto stop y que dice no necesitar más que un bocadillo y un vaso de agua pasa a ser la persona que populariza este deporte no sólo en Francia.
El responsable de que ústed escale se llamaba Patrick Edlinger
De una manera u otra, la mayoría de las personas que han comenzado ya con la escalada deportiva como paradigma, lo han hecho imitando la técnica del escalador francés. Fluido, seguro y flexible: fuerza y movimientos que le hacían parecer bailar sobre la roca se convierten en la nueva manera de pasar por lugares que unos años antes parecen imposibles. Patrick no sólo busca pasar por aquellas paredes de caliza: busca hacerlo con los movimientos más bellos posibles, de alguna manera “danzar sobre la roca”. Hoy parece increíble hasta dónde fueron capaces de llegar aquellos dos adolescentes, los dos Patrick, moviéndose como pueden y sin un franco en el bolsillo: no todo es tan bonito, claro. Les toca «tomar prestada» comida en supermercados en Chamonix para sobrevivir, o dormir en sótanos a -30º. Sin embargo unos años después, el carismático “rubio” Edlinger se convierte en referencia de la escalada deportiva, no solo con sus repeticiones de vías de máxima dificultad, sus aperturas y solos en Verdon y en Buoux, sino por el desarrollo de una de las escuelas de referencia, Ceuse.
Desaparece el escalador más carismático: Adieu, Patrick
El descubrimiento de Ceuse se produce una semana antes de un viaje a Estados Unidos. Ve aquella franja rocosa, sube hasta ella y corre por su base. Anula los billetes de avión, y pasará allí los siguientes cuatro años, marcando las pautas de ascensión de la escalada deportiva. Lo cierto es que los seguros no están muy cerca “muy simple: no teníamos dinero, de haberlo tenido habríamos colocado más seguros”, declara el propio escalador. Como recuerda Jean Paul Paris, “tenía necesidad de sponsors para escalar, pero huía de la notoriedad”. Lo cierto es que en términos absolutos, Edlinger nunca se subió a la guerra de los grados más altos: ese juego de los números quedaba para otros escaladores. Por tanto, no se puede decir que en ningún momento fuera el escalador puntero, y su estilo de escalada difícilmente sería buena idea para las modernas vías y pasos de búlder de dificultad extrema. Y pese a ello, si hay que hablar de quien es el escalador deportivo por excelencia, el nombre de este francés, que nos ha dejado a los 52 años, es el primero que nos viene a la punta de la lengua. Retirado de la dificultad tras un accidente escalando en solo en Cassis en 1995, desde 2002 tenía un refugio y su residencia en el pueblo de la Palud-sur-Verdon, el punto de partida y alojamiento para escalar en este cañón de la Provenza que ha sido la meca de escaladores durante más de una década. En los últimos años, su salud se encontraba resentida pero su relación con la roca no había cambiado. En palabras de Jean Michel Asselin, autor de una biografía que aparecerá en los próximos meses, “gracias a él hoy hay miles de escaladores; revolucionó la escalada a nivel mundial, haciendo popular un deporte que era invisible”. Debería haber estado en Grenoble, en el festival de Cine de montaña. Sus últimas palabras publicadas las recogía Dauphiné liberé: “Soy un hombre libre; no me arrepiento de nada en mi recorrido”.
Pablo Scorza: «disfruto aplicando mis conocimientos a escaladores»

Del día 22 al 26 de octubre de 2012 Pablo Scorza impartió en la sala The Climb un curso de dos sesiones de 2 horas y media de Biomecánica Funcional y prevención de lesiones en escalada. Pablo es un fisioterapeuta nacido en Brasil y afincado en Rodellar, que a sus 34 años se ha convertido en un personaje requerido y recomendado por todos los escaladores de alto nivel que han pasado por sus manos. Ha reformulado la biomecánica para adaptarla a los deportistas de todo tipo de actividades en la naturaleza, además de escaladores barranquistas o surferos. Su doctorado es, precisamente en Biomecánica Funcional, lo que no impide que en Rodellar haya quien le reconozca como «el médico del pueblo». Tras asistir a sus clases y disfrutar con su manera de exponer las ideas, Pablo contesta un pequeño cusetionario para The Climb.
Después de la realización del curso de Biomecánica Funcional que has impartido en The Climb, todos los participantes están encantados con tus ideas, han incorporado a su entrenamiento lo aprendido y no dejan de recomendarte. Pero ¿Qué es, cómo definirías la Biomecánica Funcional que tu enseñas?
Estiramientos, fuerza con inestabilidad, fortalecimiento de cadenas musculares, incidencia en las partes más débiles.. Integras ideas surgidas de varias disciplinas deportivas y médicas ¿Cuales son las influencias con las que has ido construyendo tu forma de trabajo?
Esta pregunta no tiene una respuesta, porque si lo tuviera la podría vender por internet como un producto mágico que sana a todos los problemas, jejejejejejeje!!!!
Arranca la Winter Cup en The Climb
El miércoles 7 y el jueves 8 de noviembre de 2012 se va a celebrar la primera prueba de la Copa de Invierno de la sala The Climb, que constará de dos pruebas más los días 12 y 13 de diciembre, y 30 y 31 de enero de 2013. Al igual que en la Summer Cup, celebrada en la sala entre los meses de junio y septiembre de 2012, las tres pruebas se celebrarán sobre el muro de competición de la sala, con vías aún por equipar , y con más de una sorpresa en los route setters -creadores de los bloques-,todos profesionales de la creación de vías indoor y alguno de renombre por confirmar.
Formato de la Winter Cup 2012-2013
De nuevo las pruebas se harán en dos grupos -Pro y Amateur- en categorías masculina, femenina y juvenil (de 7 a 12 años). Además, existe una categoría infantil, con una prueba para niños de 4 a 6 años. Al igual que la Copa de Verano, -Summer Cup 2012- la competición se desarrollará sobre bloques -ocho en esta ocasión- que puntuarán por igual de cara a la clasificación final. Las principales reglas son:
- Cada participante dispone de dos horas, sin límite de intentos, para encadenar el máximo de bloques entre las 18 y 22 horas del día que elija.
- En cada una de las pruebas que compone esta Winter Cup habrá premios para los tres primeros clasificados en cada categoría.
- Tras la última prueba, 30 y31 de enero de 2013, se proclamarán los ganadores de la Copa de Invierno con los mejor clasificados en las tres pruebas combinadas
El formato de la competición es «open», con lo que puede participar cualquier persona, socios y no socios de la sala The Climb, que deseen hacerlo. Los bloques son de dificultad progresiva para que cualquier escalador,desde principiantes a profesionales puedan participar y disfrutar de este encuentro deportivo.
Cada uno de los dos días de la prueba habrá sorteo de material para todos los participantes. Una vez terminada la competición, los primeros clasificados de cada categoría tendrán premios en forma de material, por parte de los
patrocinadores de esta competición, Copa de Invierno The Climb.
Dada la experiencia de la Summer Cup 2012, con una gran participación y que despertó un gran intereś, iremos informando a medida que se acerquen los días de competición sobre todo lo que sea importante, pa
ra que quien desee participar en esta fiesta de la escalada tenga siempre la información actualizada.
Además de poseer uno de los mayores muros de competición de boluder, según estándares internacionales, y del diseño de vías o route setting, marca de la casa The Climb, los diversos juegos de presas y volúmenes, en constante renovación, están pensados para que esta experiencia sea lo mejor posible para este invierno. Os esperamos.
Vídeo: Nuevo Circuito Rojo.
The Climb, nuevo concepto de rocódromo en el sur de Madrid
(Reseña del rocódromo The Climb aparecida en prensa, Suite101 y Vavel)
Los gimnasios de escalada en España suelen ser salas de entrenamiento, algo aburridas, y en las que predomina el entrenamiento de fuerza. ¿Y si existiera un gimnasio con miles de potenciales problemas de búlder, con casi mil metros cuadrados cubiertos por colchonetas, y rutas creadas por profesionales, con movimientos perfectos y que piden todo lo que exige el búlder en la naturaleza?. Esa es la propuesta de la sala «The Climb», abierta en Madrid en el mes de febrero de 2012, y que está llamado a convertirse en la sala de referencia en España para el búlder, y el entrenamiento de escalada. Muy poco que ver con otros rocódromos en Madrid o incluso con salas de boulder: cualquier escalador puede estar en esta sala varios días a la semana y no aburrirse ni echar de menos nada,
The Climb y la creación de vías y circuitos de búlder: el route setting
El concepto «route setting», de origen anglosajón,- y los «route setters» o equipadores- no son más que la creación y creadores de rutas y circuitos de escalada y búlder. Un buen búlder o circuito estará definido por seguridad, dificultad mantenida, variedad de movimientos, imaginación y permitir soluciones que no eliminen escaladores por la estatura o estilo de escalada. Con esas ideas, los circuitos de esta sala se dividen en colores: en sus cuatro metros de media de altura, quien elija una ruta de color verde (pies y manos obligados en cada color), encontrará una ruta de dificultad moderada, en las que dónde el movimiento pide un pie para apoyarse, éste siempre se encuentra, y la colocación de las manos está adecuada a la dificultad del color elegido. Los circuitos y travesías en los paneles se encuentran marcados, con la escala de dificultad «V»: la elección es del escalador.
Filosofía y búlder en la sala The Climb
Según Unai Martínez, uno de los autores de la idea y copropietario de la sala, la filosofía es «ofrecer al escalador la mejor instalación de escalada de bloque, junto con un equipo de profesionales muy experimentados, convirtiendo a The Climb en un espacio vivo, en renovación constante y completamente integrado en las actuales tendencias internacionales«. Las normas son que los pies nunca están a más de tres metros de las colchonetas – se recomienda destrepar utilizando todas las presas antes de saltar-, aprender a caer -ofrecen cursos dirigidos-, y la ayuda de un segundo escalador para prevenir caídas descontroladas. Exactamente como en los bloques naturales: la sensación que puede tener un escalador que llega a la sala es prácticamente la misma que podría tener en un día en La Pedriza o Albarracín, sin tener que buscar los bloques o acarrear la colchoneta.
The Climb como lugar de búlder
Si lo habitual es llenar un plafón relativamente pequeño con multitud de presas, la idea de esta sala madrileña es un espacio amplio con relativamente pocas presas y seleccionadas: muchas han sido traídas de lugares como Holanda o Inglaterra, en los que la escalada indoor es una modalidad mucho más extendida. En realidad, los circuitos están pensados para que la experiencia del escalador sea lo más parecida posible a la que podría tener en las zonas que más escaladores atraen. La variedad de presas, y la originalidad de sus formas no es casual: es fruto de un enorme esfuerzo de selección, búsqueda y aprendizaje en los mejores rocódromos europeos. Los vestuarios, duchas, cafetería y sala de descanso hacen que cualquiera pueda convertirse en practicante de este deporte aunque disponga de poco tiempo, y de forma cómoda y divertida.
Entrenamiento para el búlder y competición: campus, tablas y Moonboard
«The Climb» ofrece todo lo que necesita el escalador que desea entrenar su físico fuera de los paneles: dos paneles de «campus», tablones multipresa, un panel desplomado con presas pequeñas (Moonboard) y una pequeña zona de musculación, además de una sala multiuso para estiramientos y entrenamiento funcional. Sin embargo, la sala no sería lo que es sin el muro de competición que se ubica en uno de los laterales de ésta. En este muro, el más grande de Europa en la actualidad, los circuitos de colores no marcan la dificultad, sino las diversas propuestas, con la graduación de la dificultad en la primera presa del muro. Uno puede medirse con los bloques creados por las grandes figuras de este deporte con movimientos pensados para la competición. Los eventos y competiciones en los que han participado figuras de la escalada y el búlder de la escena internacional han dejado propuestas creadas por los mejores equipadores o «route setters»: cualquiera puede medirse con un problema creado por los hermanos Olcina, Ignasi Tarazona o Paul Robinson.
Entrenar para búlder: como llegar a «The Climb», entre Leganés y Alcorcón
La sala se encuentra en el término municipal de Alcorcón (Madrid), en la calle Carbón nº 5, y ocupa una nave completa en esta zona. Es fácilmente accesible en metro desde las estaciones de «Puerta del Sur» y «Joaquín Vilumbrales» de la línea 10 madrileña. El horario de apertura es de lunes a domingo, de 8 de la mañana a 11 de la noche (los domingos cierra a las siete). El acceso en vehículo es muy sencillo: al encontrarse enclavado en una zona algo separada del casco urbano, siempre se encuentra donde aparcar. Es sin duda uno de los lugares de obligada parada para culaquier escalador madrileño o de paso por esta ciudad.
Nuevos y duros Boulders en el Muro de Competición.
La última semana de septiembre se han equipado unos cuantos bloques nuevos en el Comp Wall. De distintos niveles que van desde el 6b a un posible 8a/+. Os dejamos con un vídeo en el que se realizan tres de ellos con presas azules y equipados por los hermanos Olcina y Unai. Escalados por el joven Sergio Jiménez.
El muro de competición sufre una actualización constante.
Ben Moon, pionero del bloque y el Moonboard
El búlder no es ni mucho menos una disciplina deportiva reciente: si se tiene en cuenta que la mayor parte de los deportes no han establecido sus reglas definitivas hasta los últimos cincuenta años, no se puede decir que tenga un gran retraso . Los pioneros de esta modalidad (dificultad pura en los movimientos en roca, sin tener que preocuparse por la cuerda, aseguramientos y logística, lo que exige una altura moderada de los problemas), como John Gill, realizaron sus propuestas a finales de la década de 1960-70. En Fontainebleau (París, Francia), hacía muchos años que la idea de los bloques como algo más que un medio de entrenamiento había cuajado.
Ben Moon, pionero del bloque actual
A la hora de buscar un escalador pionero y “gurú” del búlder actual, sin embargo, hay que pensar en un inglés mucho más joven, nacido en 1966, Ben Moon. Ben fue contemporáneo en su mejor época como escalador de otro inglés, Jerry Moffat, y del alemán Stefan Glowacz. Aunque solo le separan seis años de edad con respecto a Güllich y Patrick Edlinger (el icono de la escalada de los años 80 en Francia), Moon pertenece ya a una generación mucho más atrevida, y sin miedo a los números o grados de dificultad en la escalada. Ben nunca ha tenido el carisma de los dos grandes mitos, Edlinger y Güllich: sin embargo lo suyo ha sido encadenar vías cortas y explosivas, en las que la fuerza se convierte en la protagonista. Eso, en los años en que la corriente era la escalada deportiva, libre con cuerda, y las “liberaciones” de líneas abiertas en otros estilos en paredes clásicas, era ir un poco a contra corriente. Sus propuestas, con y sin cuerda, son características: cortas, muy difíciles y exigentes físicamente. La evolución lógica de esta tendencia es el búlder.
Ben Moon, escalada deportiva y Hubble y bloque
El joven Ben Moon, quien comenzó a escalar con siete años, saltó a las revistas del sector cuando con 16 años (1984) encadenó Statement of Youth -8a-. Tan solo seis años después rompía las barreras de la dificultad al proponer en Raven Tor -Peak District, cerca de Sheffield- Hubble, una vía corta de fuerza que cotó como el primer 8c+ -grado francés- de la historia. Un año después dejaba de ser la vía de escalada más dura de la mano de Wolfgang Güllich, quien proponía el primer 9a. Hubble en realidad no deja de ser un bloque algo alto, con un paso desesperado. Es en esta disciplina, el bloque o búlder, donde desde entonces (y hace ya más de veinte años), Ben Moon ha destacado. En el desierto que es la escena de la escalada actual británica, aún son relevantes las realizaciones de Ben, con bloques en el grés francés de Fontainebleau, y sobre todo en la adherente arenisca británica, el “gritstone” del Peak District. Los bloques de Moon son dificultad técnica y fuerza pura, realizados a base de tesón y entrenamiento. Recientemente, en 2012, el joven checo Adam Ondra ha propuesto que Hubble quizá es tan difícil como Action Directe, con lo que podría ser el primer 9a, aunque puede que reescribir la historia sea algo un poco absurdo en deporte.
Ben Moon y el entrenamiento en escalada: Moonboard
El escalador inglés a sus 46 años siempre ha dicho que los mejores métodos de entrenamiento son: búlder indoor, campus board (o panel Güllich), y las dominadas a un brazo. A través de su empresa Moonclimbing ha introducido el Moonboard. Éste no es más que un panel desplomado de madera del estilo de los que llenaban los sótanos de Sheffield y permitieron adquirir la fuerza para vías como Agincourt y Maginot Line. El panel tiene una inclinación determinada (la misma dónde quiera que se construya), y un número y lugar para los agujeros dónde colocar las presas obligatorio. Así, consultando la web de la empresa de Moon, se pueden recrear problemas reales con presas fabricadas por escaladores de élite, o crear nuevos problemas y que estos se prueben en cualquier lugar del mundo donde se haya instalado este panel y se hayan adquirido las presas. Junto al sistema que Jerry Moffat trajo de Alemania (el Campus de Güllich, otro de los objetos que adornó los sótanos de Sheffield), esta idea de Ben es uno de los avances que más ayudan a mejorar el nivel de los escaladores, sobre todo de los que se dedican al búlder. Cuando se habla de route setting (creación de problemas indoor), su aplicación al entrenamiento tiene su máxima expresión en este panel ideado por Moon. Aunque hoy día este británico aficionado al fútbol y al golf, y enamorado del ambiente en la isla, no intente ya romper límites de dificultad, sus productos y consejos sobre entrenamiento siguen siendo de los más válidos para quien desee mejorar en sus escaladas en bloque.
Nuevos Boulders -circuito azul-
Esta última semana se han equipado nuevos bloques para el circuito azul. Haciendo el circuito más amplio y con mayor variedad de movimientos. Las dificultades de este circuito están comprendidas entre el 6b y el 7a (aprox). Desde pequeñas y raras regletas, a grandes romos, hacen de este circuito uno de los mas completos y técnicos de la sala.
Curso de Biomecánica funcional-Entrenamiento Preventivo
Curso de Entrenamiento Preventivo
1er turno L22 y X24 Oct. de 19.00/21.30 2do turno M23 y J25 Oct. de 19.00/21.30
Científicamente la Biomecánica Funcional suma técnicas de fisioterapia, fisiología del ejercicio, biomecánica y osteopatía. El método ha sido desarrollado desde el 2000 por el fisioterapeuta y escalador brasileño Pablo Scorza aplicándolo sobre muchos escaladores y todo tipo de necesidades diferentes. Escaladores como Dani Andrada, Edu Marín o Robyn Erbesfield-Raboutou usan la Biomecánica Fúncional habitualmente en sus rutinas de entrenamiento. .
El objetivo del curso es prevenir lesiónes escalando, entendiendo más sobre las características especiíicas de la escalada y sus influencias sobre el cuerpo, todo para escalar mejor y mas agusto.
En el curso se trabajarán:
• Rutinas para preparar la estructura profunda del cuerpo antes de escalar. • Ejercicios para evitar lesiones y optimizar la recuperación.
• Ejercicicos para compensar y re-equilibrar la musculatura al final de sesión. • Biotípos posturales, estudio de los diferentes y analisis del propio.
• Técnicas de auto-conocimiento y armonía corporal.
• Ejercicios de equilibrio y flexibilidad.
Si entendemos como la escalada puede sobrecargar de maneras distintas nuestros cuerpos, sabremos que hacer en cada situación, cambiando los estilos de escalada, las conductas de calentamiento y las compensaciones específicas después de escalar.
El curso se reparte en 2 sesiones de 2,5h, ya que son de compromiso físico y fatiga alta. Mas información en www.biomecanicafuncionalescalada.blogspot.com
Inscripciones e información en www.theclimb.es tlf:916 428 288
Tarifas: 70€ socios The Climb. 80€ no socios.
Las Inscripciones se harán en The Climb. C/ Carbón 5. (Pol.Ind.San José de Valderas) Leganés Madrid o haciendo una transferencia al número de cuenta 3035-0121-35-1210083623 poniendo en concepto: Biomecánica. Nombre y Apellidos. Fecha Elegida.
Las plazas son limitadas.
La fecha de cierre de inscripción es el 15 de octubre.